¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo baxulaft@gmai.com no ha sido verificado. VERIFICAR CORREO

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí.

Homicidios en alza

Lo sucedido en décadas recientes –cientos de miles de asesinados– ha sido una tragedia humanitaria.

La noticia anticipada se ha confirmado, una especie de aguafiestas frente a las esperanzas del nuevo año: la tendencia del homicidio en Colombia, en baja continua desde 2011, se revirtió en el 2018.
Un estudio de la Fundación Ideas para la Paz (FIP) había advertido ya que, entre enero y agosto del año pasado, el número de homicidios se había incrementado en 8,6 % frente al mismo período del año anterior. Según datos de la Fiscalía, el 2018 cerró con un incremento anual superior al 3 %. Los departamentos más afectados son los mismos identificados por el informe de la FIP: Antioquia, Córdoba y Nariño (Jerónimo Castillo, María E. Lleras y Manuela Suárez, ‘Sin política pública contra los homicidios no es posible proteger la vida en Colombia’, 2018).
Hay que mantener las alarmas encendidas. Imposible minimizar el problema. Lo sucedido en décadas recientes –cientos de miles de personas asesinadas– ha sido una verdadera tragedia humanitaria. Esta pérdida tan descomunal en vidas humanas cuestiona los fundamentos de nuestra organización social.

Urge detener la tendencia hacia
el alza de los homicidios. Y redoblar esfuerzos para seguir edificando una comunidad
con porvenir.

Es cierto que, desde fines de la década de 1980, cuando sufríamos una de las tasas de homicidios más altas en el mundo, las mejoras han sido significativas, en términos absolutos y relativos.
Lo sucedido en Bogotá es particularmente relevante. Como lo destacó un informe de Óscar Murillo, “Bogotá tiene hoy la tasa de homicidios más baja en 40 años (...), 12 puntos por debajo de la media nacional, que es de 24,7” (EL TIEMPO, 3/1/2019). En un número importante de municipios “no se han cometido homicidios en los últimos años”, punto destacable en el estudio de la FIP y sugerente para cualquier exploración de soluciones del problema.
El retroceso en la tendencia a la baja desde 2011 no ha sido generalizado en todo el país. Grave en algunos casos (como en municipios de Antioquia, Córdoba y Nariño), mejoras continuadas en otros, mientras que en unos más, las señales son de estancamiento. Hay otras mejoras: en el esclarecimiento de los homicidios, por ejemplo, como informó la Fiscalía.
Mucho se puede aprender de estos y otros avances en la que ha sido una dolorosa trayectoria. Pero las dimensiones del problema siguen siendo gigantescas.
La tasa de homicidios en Colombia (22 por cada 100.000 personas) es todavía más alta que el promedio regional –al parecer, la más alta del mundo–. La tasa de homicidios en Bogotá se mantiene aún por encima de dos dígitos. Se teme además, como lo expresa el informe de la FIP, que la magnitud del problema nacional sea mayor, pues algunos homicidios no estarían siendo registrados en las estadísticas como tales. Y hay casos específicamente agravantes, como el asesinato de líderes sociales.
El problema es de dimensiones tan gigantescas como complejas. No todos los homicidios responden a las mismas causas. Como se ha mencionado, el comportamiento de los homicidios varía en todo el país. “Es importante entender las diferencias en las dinámicas de cada territorio –se observa en el informe de la FIP– para elegir la respuesta más adecuada para enfrentar el homicidio”.
¿Existe una estrategia nacional para enfrentar de manera efectiva un problema de tanta envergadura?
El informe de la FIP vuelve a poner sobre la mesa un debate necesario. Su punto de partida debe ser un mayor reconocimiento de la prioridad que debe dársele al problema en la agenda nacional. Cualquier sociedad civilizada se construye sobre un fundamento básico: el respeto por la vida. En las últimas décadas, Colombia logró conquistas importantes. Urge detener la tendencia hacia el alza de los homicidios. Y redoblar esfuerzos para seguir edificando una comunidad con porvenir.
icono el tiempo

DESCARGA LA APP EL TIEMPO

Personaliza, descubre e informate.

Nuestro mundo

COlombiaInternacional
BOGOTÁMedellínCALIBARRANQUILLAMÁS CIUDADES
LATINOAMÉRICAVENEZUELAEEUU Y CANADÁEUROPAÁFRICAMEDIO ORIENTEASIAOTRAS REGIONES
horóscopo

Horóscopo

Encuentra acá todos los signos del zodiaco. Tenemos para ti consejos de amor, finanzas y muchas cosas más.

Crucigrama

Crucigrama

Pon a prueba tus conocimientos con el crucigrama de EL TIEMPO

Más de Redacción