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Venezuela

Nicolás Maduro busca conseguir más votos regalando dinero

El régimen de Maduro levanta sospechas entre los economistas venezolanos, que temen que estos bolívares los imprime el Banco Central de Venezuela sin mayor control.

El régimen de Maduro levanta sospechas entre los economistas venezolanos, que temen que estos bolívares los imprime el Banco Central de Venezuela sin mayor control.

Foto:Federico Parra /AFP

Está repartiendo el Bono Carnaval, equivalente a 3 dólares. Se desconoce procedencia de los fondos.

“Yo abrazo y protejo al pueblo”, dijo el mandatario Nicolás Maduro al anunciar la puesta en vigencia del Bono de Carnaval, una entrega de dinero contante y sonante que espera entregar a ocho millones de venezolanos por 700.000 bolívares, equivalentes a tres dólares al precio del mercado paralelo.
“Este bono es para que nadie pueda amargarle el carnaval al pueblo de Venezuela”, señaló.
De este modo, el ensayo de subsidio directo que comenzó en septiembre del año pasado con la entrega de 250.000 bolívares a tres millones de familias para el inicio del año escolar (al que llamó Bono Único Escolar) se confirma como una política de Estado, pues desde entonces el oficialismo ha creado ocho “bonos protectores” con los que deposita dinero en las cuentas de quienes se han afiliado en el “carné de la patria”.
Según cifras oficiales, poco más de 16,5 millones de venezolanos han sacado este nuevo documento de identificación, que cuenta con un código QR, el cual al ser afiliado en un “monedero virtual” establecido en la página www.patria.org.ve abre las puertas a estos subsidios que se perfilan como una nueva forma de populismo 2.0.
De este modo, el régimen pagó el Bono Navideño, el Bono Niño Jesús y el Bono de Reyes, cada uno por 500.000 bolívares activado para 4 millones de afiliados al carnet y comenzó a pagar también el Bono Embarazadas, que consiste en 700.000 bolívares mensuales para 152.000 embarazadas y un millón de bolívares tras el nacimiento del niño.
La estructura de subsidios también aplica para los hogares de escasos recursos con el nombre de Bono Gran Misión Hogares de la Patria, que entregará mensualmente entre 320.000 y hasta 1,6 millones de bolívares mensuales dependiendo del número de integrantes de la familia. Para 55.000 discapacitados registrados con el carné les tocará el Bono José Gregorio Hernández por 100.000 bolívares mensuales.
“Ante la imposición del bloqueo financiero aplicado por el gobierno de EE. UU. para atacar la moral y dañar la calidad de vida de los venezolanos a través del saboteo sistemático y multiforme de la economía”, justifica el Ministerio de Comunicación e Información venezolano la creación de este sistema de subsidios, que además incluye la entrega de las bolsas o cajas Clap (Comités Locales de Abastecimiento y Producción) con alimentos de la cesta básica para por lo menos seis millones de familias.
Sin explicar exactamente de dónde se obtienen los recursos para la repartición, el régimen de Maduro levanta sospechas entre los economistas venezolanos, que temen que estos bolívares los imprime el Banco Central de Venezuela sin mayor control y empujando, con semejante liquidez, el aumento de precios que ya sufren los productos en Venezuela.
Solo en diciembre del 2017, la inflación fue de 85 por ciento y cerró el año en más de 2.600 por ciento, aunque el Gobierno venezolano aumentó en seis oportunidades el salario mínimo.
Un informe de la firma Aristimuño Herrera & Asociados da cuenta que desde diciembre el régimen ha duplicado la liquidez monetaria pasando de 71,5 billones de bolívares en circulación a 149,8 billones. El Bono de Carnaval, el más reciente, significa la inyección de otros 5,6 billones de bolívares a la economía, azotada también por el desabastecimiento crónico de productos básicos de alimentación.
Paradójicamente, este aumento del circulante no se traduce al mismo ritmo en dinero en efectivo, que a las largas filas por alimentos y medicinas también hacen ahora frente a los bancos para obtener algo de billetes. Ante la escasez, los bancos apenas entregan entre 10.000 y 20.000 bolívares por persona (0,043 y 0,08 dólares al precio del mercado paralelo), que sirve a duras penas para pagar unos billetes de autobús o un tinto.
VALENTINA LARES MARTIZ
Corresponsal de EL TIEMPO
Caracas
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