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Alergias por ácaros están bajo tratamiento biotecnológico

En Colombia, tanto el asma como la rinitis, han aumentado en los últimos años.

Las enfermedades alérgicas tienen un fuerte impacto social y económico. Se estima que ocasiona un bajo rendimiento laboral y académico, así como una baja calidad de vida en quienes las padecen. Adicional a ello, su atención genera altos costos al sistema de salud.
Diversas investigaciones plantean que en América Latina este tipo de enfermedades son comunes. En Colombia, tanto el asma como la rinitis, dos manifestaciones alérgicas, han aumentado en los últimos años, pasando del 10 al 23 % y del 12 al 32 %, respectivamente.
Son diversas las causas de este tipo de enfermedades. Se cree que están asociadas a la herencia genética; también al contacto con bichos, conocidos como ácaros del polvo de las casas que producen sustancias conocidas como alérgenos; y a la naturaleza y características de estos animalitos microscópicos que se reproducen en áreas donde predomina el polvo, por ejemplo en colchones, alfombras y cortinas.
Estos bichos son artrópodos, es decir invertebrados, pertenecen a los arácnidos y cohabitan con el ser humano. Sin ayuda de un microscopio es muy difícil observarlos . Los especialistas consideran que entre un 10 y un 30% de la población mundial es afectada por las alergias que generan este tipo de ácaros.
Pero, ¿cómo evitar que estos animalitos sigan haciendo de las suyas? La recomendación más simple es mantener todas las áreas limpias del polvo para contener o reducir las alergias. Para lograr ese aislamiento los especialistas recomiendan recubrir los colchones con protectores especiales y aplicar sustancias conocidas como acaricidas sobre los sitios poblados de ácaros, tanto en lugares de trabajo como en las escuelas. No obstante, esas medidas no son del todo eficaces, entre otras razones por la alta humedad y las altas temperaturas, en algunas regiones del país.
Una vez adquirida la alergia, los médicos recomiendan la toma de medicinas para aliviar sus efectos, como lagrimeo, rasquiña, secreción de moco en la nariz. Son comunes las recetas de antihistamínicos y cuando hay mayor severidad de la afectación alérgica se recurre a sustancias más fuertes, como los broncodilatadores y los esteroides administrados por vía inhalatoria.
A estas alternativas se les suman tratamientos conocidos como inmunoterapia, que consiste, según los investigadores, en administrarle a los pacientes “cantidades crecientes de los alérgenos inductores de la respuesta inmune alérgica hasta alcanzar la tolerancia, es decir experimentar exposición a los alérgenos que participan de la respuesta alérgica sin tener manifestación de síntomas clínicos”.
Sin embargo, con la inmunoterapia se corren algunos riesgos. Dado que no todas las personas reaccionan de la misma manera al procedimiento estándar, se teme el desencadenamiento de reacciones adversas en los pacientes. El tema ha sido una constante preocupación de los científicos del Instituto de Investigaciones Inmunológicas de la Universidad de Cartagena, quienes, por más de 20 años, se han dedicado al estudio y a la búsqueda de tratamientos clínicos para atender a los pacientes alérgicos.
Con toda la experiencia acumulada, proponen alternativas para fortalecer los procedimientos de inmunoterapia contra las alergias por ácaros en zonas tropicales. Los avances les han permitido conocer datos epidemiológicos sobre los principales alérgenos asociados con el asma y la rinitis alérgica en la región Caribe, así como el desarrollo de infraestructura y experticia en la identificación, caracterización y producción biotecnológica de los principales alérgenos de los ácaros del polvo de las casas.
En este instituto se está trabajando en la producción de alérgenos en laboratorio a partir de sus propias moléculas mediante procesos que logran conservar sus propiedades biológicas de sus equivalentes naturales, lo que abre la posibilidad de usarse en humanos para atacar las enfermedades alérgicas y alcanzar un alto grado de inmunidad.
Este esfuerzo es posible gracias a la biotecnología, particularmente a la tecnología del ADN recombinante que, a juicio de los científicos, “ha producido enormes avances en la caracterización de alérgenos, en la producción de un número importante de ellos, en el desarrollo de nuevas posibilidades de inmunoterapia y desarrollo de vacunas, así como en el conocimiento de los mecanismos inmunológicos implicados en las enfermedades alérgicas”.
Como fruto de este trabajo, el Instituto ha obtenido patente de invención en Singapur, Estados Unidos y Colombia sobre dos de sus productos recombinantes desarrollados. De esta manera se avanza en el tratamiento de las alergias, un problema que padecen millones de personas.
JUAN DIEGO RESTREPO E.*
*Versión periodística del texto Diagnóstico y tratamiento de las alergias por ácaros, escrito por Leonardo Puerta Llerena, Dalgys Martínez de la Ossa, Luis Caraballo Gracia, José Fernando Cantillo Romero, Marlon Múnera Gómez, del Grupo de Alergología Experimental e Inmunogenética de la Universidad de Cartagena.
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