¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo baxulaft@gmai.com no ha sido verificado. VERIFICAR CORREO

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí.

Gobierno

Naranjo, de los duros golpes al narcotráfico al camino de la política

El general Óscar Naranjo.

El general Óscar Naranjo.

Foto:Archivo EL TIEMPO

Su llegada a la Vicepresidencia enfatiza la transición que el país hace de cara al posconflicto.

La designación del general Óscar Naranjo como nuevo vicepresidente abre la puerta para un revolcón en la última fase de la administración de Juan Manuel Santos.
Sin duda, su postulación le da un énfasis a la transición de esta fase del proceso con la guerrilla de las Farc, que será clave para la consolidación de la paz.
Por eso, no es un detalle menor la llegada de Naranjo, un hombre que ha estado ajeno a la política pura, pero que sí estuvo involucrado en las negociaciones de La Habana como ministro consejero del posconflicto.
“Creo que no es irrelevante que sea alguien que viene directamente del sector de la Policía. Creo que para mí es el mensaje adecuado ahora en el país: una persona con credenciales en seguridad en el país, pero que le apuesta a la paz negociada, me parece que tranquiliza. Pero también creo que es un mensaje claro para Germán Vargas, porque en esto perdió la batalla porque él quería a alguien de Cambio Radical”, dijo a ELTIEMPO.COM la politóloga Laura Gil. (Por qué deja su cargo el vicepresidente Germán Vargas Lleras?).
De esta manera, Naranjo por fin se deja seducir por el camino político que lo ronda desde que dejó la dirección de la Policía Nacional en el 2012.
“Me parece que es un acto de justicia divina que el nombramiento caiga en manos de quien debió ser designado inicialmente”, agrega Gil.
Por su parte, María Victoria Beltrán, directora ejecutiva de la Fundación Ideas para la Paz, señala que el nombramiento del general Naranjo en un contexto donde el país es testigo del desarme de las Farc tiene toda una lógica por su influencia y relaciones entre las organizaciones estadounidense de seguridad, especializadas en la lucha contra el narcotráfico.
Naranjo creó la central especializada en inteligencia e información delincuencial (actual Dipol) y en el 2010 fue designado como agente especial de la Agencia Antidrogas de los Estados Unidos, DEA.
El general Naranjo es mucho más allá que un excomandante de la Policía. Su relevancia aquí tiene que ver con su trayectoria frente al crimen organizado y por el tema de garantías de seguridad en torno al proceso de paz”, dijo Beltrán.
Beltrán destaca que el general Naranjo es una de las personas con mayor conocimiento sobre el tema de drogas en la región y que, ya en la mesa de diálogos entre Gobierno y Farc, fue quien lideró el tema de garantías de seguridad en el país posterior a la firma del acuerdo.
Este sería un aspecto importante que asumiría en la Vicepresidencia, ahora que se dio inicio a la implementación de los acuerdos.
Sobre si la llegada del exdirector de la Policía a la Vicepresidencia tendría algún mensaje a las Fuerzas Armadas, el general (r) Néstor Ramírez, presidente del Cuerpo de Generales y Almirantes de la Reserva Activa de las Fuerzas Militares, no se atreve a dar algún juicio al respecto, pero sí considera que su llegada corresponde a la sumatoria de su labor como policía y luego el trabajo desarrollado en La Habana.
“Es un nombramiento que obedece a la continuidad, sin que yo esté de acuerdo o en desacuerdo, del proceso iniciado en La Habana. El presidente necesita desarrollarlo, por eso pienso que ha nombrado al general Naranjo, para que colabore en esos desarrollo”, sostiene.
Aunque se ha rumorado que Naranjo podría no asumir como vicepresidente al no pertenecer al mismo partido del Presidente, tal como lo indica el artículo 203 de la Constitución, en el caso del general esto sería diferente.
Como Naranjo pertenecía a la Policía no debía participar en política y por tanto no podía estar inscrito en ningún movimiento político. En este caso, al llegar a la Vicepresidencia, el partido de 'la U', la colectividad a la que pertenece el Presidente, le daría su aval para pertenecer al mismo.
ELTIEMPO.COM
icono el tiempo

DESCARGA LA APP EL TIEMPO

Personaliza, descubre e informate.

Nuestro mundo

COlombiaInternacional
BOGOTÁMedellínCALIBARRANQUILLAMÁS CIUDADES
LATINOAMÉRICAVENEZUELAEEUU Y CANADÁEUROPAÁFRICAMEDIO ORIENTEASIAOTRAS REGIONES
horóscopo

Horóscopo

Encuentra acá todos los signos del zodiaco. Tenemos para ti consejos de amor, finanzas y muchas cosas más.

Crucigrama

Crucigrama

Pon a prueba tus conocimientos con el crucigrama de EL TIEMPO