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La paz de Abad Faciolince y Janne Teller

Más allá de discusiones políticas, pueden encontrarse otros elementos para formarse una opinión valiosa. Por ejemplo, el aporte dado por los escritores.

Francisco Barbosa
Como se preveía, el plebiscito se ha ido incorporando al debate ciudadano con mucha fuerza. Para algunos analistas, leerse los acuerdos no conduce necesariamente a formarse un criterio para el voto del 2 de octubre, para otros, la lectura es esencial a fin de decidir correctamente.
Mi idea es simple: votarán ‘Sí’ aquellos que creen en la paz; los que lo hagan por el ‘No’ justificarán su voto con la idea de que el acuerdo es una fanfarronada santista y que las Farc deberían ser derrotadas militarmente y sus miembros ser condenados a importantes penas de prisión. Será un voto de emoción porque el debate, lejos de las particularidades técnicas, se ubica entre el pesimismo y el optimismo, entre mirar al pasado conflictivo o avizorar un horizonte prospectivo.
Sin embargo, más allá de esas discusiones políticas, pueden encontrarse otros elementos para formarse una opinión valiosa. Por ejemplo, el aporte dado por los escritores. Y es allí donde quiero detenerme con dos contribuciones a la paz y al ‘Sí’ del 2 de octubre.
La primera, la columna ‘Ya no me siento víctima’ escrita por Héctor Abad Faciolince en el diario El País de España; la segunda, el libro ‘Guerra’ de Janne Teller (Seix Barral, 2016).
Abad explica en su columna la realidad que ha vivido como persona afectada por la violencia (su padre fue asesinado por los paramilitares y su cuñado ha sido secuestrado dos veces por las Farc), mostrando que, más allá de venganzas y alegorías de justicia, la historia de la guerra colombiana es inatajable: más de 200.000 personas asesinadas, más de 8 millones de víctimas y una imposibilidad real de justicia transicional.
En igual sentido, refuta la tesis de la impunidad que han venido repitiendo los defensores del ‘No’ al plebiscito. Abad Faciolince evidencia con tino que la justicia transicional no busca solamente una cárcel para los violadores de derechos humanos, sino la verdad, la reparación y las garantías de no repetición. Para el premio nobel de literatura Mario Vargas Llosa, que no es justamente el hombre de izquierda que defendería un acuerdo de paz como el pactado en La Habana, las razones políticas y jurídicas de Abad Faciolince son suficientes, y los argumentos emocionales y éticos, inobjetables.
Así como el texto de Héctor Abad es inspirador para el ‘Sí’ en el plebiscito, el libro ‘Guerra’ de Janne Teller es fundamental para entender la distinción entre una prospección de Colombia en paz o en guerra. La escritora danesa escribe una corta fábula sobre una posible guerra en una Colombia imaginada. En el relato, todo lo que funciona en nuestras ciudades desaparece. No hay medicinas, comida, servicios, infraestructura, etc. Aparece el conflicto que despedaza nuestras capitales. Miles de desplazados urbanos se mueven hacia zonas rurales en relativa paz. Una tragedia sin igual.
Recordé al finalizar la lectura como en el 2008, en Nantes (Francia), ciudad en la que estudiaba, conocimos con mi familia a una mujer siria. Era una persona culta, inteligente, profesional, políglota y trabajaba en su país como consultora e iba y venía a Francia con regularidad. Cuando hablamos de Colombia y Siria, nos dijo que debíamos ir a conocer su país para disfrutar la hermosa historia de Damasco y otras joyas sirias. En ese momento, Siria no estaba en guerra y ella estaba lejos de imaginar que se quedaría sin país cinco años después.
Cuando hablamos de Colombia, nos comentó que iría a visitarnos, pero solo si la guerra desaparecía. Ni ella sabía que su país moriría en la guerra, ni nosotros, que el nuestro podría tener un camino de paz cierto.
Ese recuerdo y la frase de Héctor Abad al finalizar su columna, seguramente, me retumbarán en la cabeza el 2 de octubre: “La paz se hace para olvidar el dolor pasado, para disminuir el dolor presente y para prevenir el dolor futuro”.
Francisco Barbosa
* Ph. D. en Derecho Público de la Universidad de Nantes (Francia) y profesor de la Universidad Externado de Colombia.
Francisco Barbosa
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