¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo baxulaft@gmai.com no ha sido verificado. VERIFICAR CORREO

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí.

El colegio de Vargas Lleras

Él encarna el perfil de algunos de los personajes que salieron del mismo colegio del que yo lo hice.

Yo a Vargas Lleras podría pasarle que sea soberbio, que haya hecho campaña mientras era vicepresidente y lo haya reconocido en una entrevista no solo como si no estuviera mal, sino como si no estuviera prohibido en el Código Disciplinario Único. Claro que, hay que decirlo, la ley es ambigua y se presta para doblarla sin romperla. Le podría obviar que se crea con derecho divino para pasar por encima de la gente, que encienda a cocotazos a sus escoltas y que se porte como si nacer en la élite fuera un privilegio y no un compromiso, más si eligió dedicarse a la política.
También le soportaría su mal genio y sus sutiles y no tan sutiles formas de abuso, así como su descaro a la hora de desmarcarse del gobierno en el que estuvo siete años y de acercarse a la línea de Uribe sin declararse uribista. Me jode un poco que sea tan caradura para haberse inscrito por firmas y no por su partido, Cambio Radical, porque es literalmente su partido y nada pasa o deja de pasar sin que él lo apruebe, pero también podría tolerarlo.
Lo que hace que me sienta incapaz de votar porque encarna el perfil de algunos de los personajes que salieron del mismo colegio del que yo lo hice, y, con el cariño que siento por el rector del establecimiento y no obstante los buenos momentos que allí pasé, yo no podría elegir para presidencia a alguien de ese estilo. Al menos en mi época, al José Joaquín Casas llegaban muchos de los estudiantes que echaban del Cervantes, el Campestre, el Moderno, muchos niños bien que, ya sabemos, son los niños mal.

En la entrevista yo lo vi cínico, dominante, intolerante, pero también decidido y preparado para liderar una democracia como la nuestra, lo que no es ningún elogio

Eso sí, debo aclarar que no eran la mayoría de los alumnos, pero sí muchas veces los más notorios. Y en ese saco estamos Vargas Lleras y yo, aunque debo mencionar que allí también estudiaron Rafael Novoa y Carlos Enrique Martínez, el recordado concejal de Chía. Y no es que necesariamente hayamos adquirido las malas mañas en el Jose Joaco, como lo llamamos, pero sí que las practicamos durante los años de colegio.
Menos ilustre que los que acabo de mencionar, recuerdo a un compañero de salón que era el cliché del bogotano de estrato seis: pelo engominado, loco por las mujeres, las camisetas polo, el golf y los carros. A veces llegaba al colegio en Mercedes-Benz y se escapaba por las tardes, después de almuerzo, para ir al club. ¿Envidia? Algo, no por su estilo de vida sino por las facilidades que el dinero y la posición social pueden dar en una sociedad como esta. Su sueño era estudiar en los Andes, donde para pasar necesitaba mínimo 320 sobre 400 en el Icfes. Sacó 256 y celebró con sus amigos que aún podía estudiar en la Javeriana. Yo entré a la Javeriana con un digno 324, y nunca lo vi por allí.
Con Vargas Lleras no alcancé a estudiar, pero creería que era por el estilo de mi excompañero. Principalmente por eso, aunque también por todo lo mencionado al comienzo de esta columna, no votaría por él.
De vuelta a la actualidad, no salió bien parado después de la entrevista que le hicieron en Caracol, donde quedó retratado. De hecho, una encuesta afirma que después de verla, más del 68 por ciento de la gente no votaría por él. Igual, creo que va a ser presidente porque la maquinaria política que tiene detrás no sale reflejada en los sondeos.
En la entrevista yo lo vi cínico, dominante, intolerante, pero también decidido y preparado para liderar una democracia como la nuestra, lo que no es ningún elogio. En algún momento dijo que en estos meses no oirían de él ningún insulto contra sus rivales. Seguro lo cumple. Eso sí, cuando acabe la campaña y sea presidente nos va a tratar peor que a sus escoltas.
ADOLFO ZABLEH DURÁN
icono el tiempo

DESCARGA LA APP EL TIEMPO

Personaliza, descubre e informate.

Nuestro mundo

COlombiaInternacional
BOGOTÁMedellínCALIBARRANQUILLAMÁS CIUDADES
LATINOAMÉRICAVENEZUELAEEUU Y CANADÁEUROPAÁFRICAMEDIO ORIENTEASIAOTRAS REGIONES
horóscopo

Horóscopo

Encuentra acá todos los signos del zodiaco. Tenemos para ti consejos de amor, finanzas y muchas cosas más.

Crucigrama

Crucigrama

Pon a prueba tus conocimientos con el crucigrama de EL TIEMPO

Más de Redacción