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Mundial Rusia 2018

¡Colombia se refundó en su balón al pie!

Celebración de la Selección Colombia contra Polonia.

Celebración de la Selección Colombia contra Polonia.

Foto:Mauricio Moreno / CEET

Con la pelota, la Selección deslumbró sobre Polonia, para mirar de frente su opción de clasificar.

Camilo Nieto
Si la Selección Colombia estaba extraviada en su fútbol y se creía confundida y perdida después de la oscura derrota contra Japón en la apertura del Mundial de Rusia, este domingo se reencontró a sí misma gracias a la luz de la pelota. Con ella, con la pelota, se iluminó y deslumbró en el 0-3 sobre Polonia, en Kazán, para levantarse y mirar de frente su opción de clasificar a la segunda ronda, el próximo jueves, cuando enfrente a Senegal.
Podrá sonar a obviedad, pero en el balompié lo más importante es el balón, y mucho mejor si es con buen pie. El fútbol se llama como se debe jugar. Pues así, refundándose en sus propios principios, que no aparecían desde la fantasía del Mundial de Brasil de hace cuatro años, la Selección jugó el balón al pie y se levantó impetuosa como el ‘pájaro de fuego’, mitad calor y brillo, mitad belleza.
Y para tener la pelota en una danza, José Pékerman, el técnico que el martes pasado era tratado de bestia, hoy es un estratega bestial: puso a Juan Fernando Quintero de pareja de James Rodríguez para que bailaran en el medio campo a los polacos. Y el ballet se hizo. Hicieron de la pelota una fiesta. Se juntaron, se buscaron, se marcaron el paso.
Cuando Colombia pensó que necesitaba ganar ‘como fuera’ este partido, entendió entonces que ese ‘como’ fuera con la pelota. Así, Quintero fue la piedra fundamental de una alineación renovada después del tropezón contra Japón.
Además, Yerry Mina y sus 1,95 metros de altura fueron inicialistas para ganarle el cabezazo defensivo a Lewandowski y para buscarlo para el gol en la otra área, como ocurrió en el 0-1. No estuvo Cristian Zapata, el más veterano de la zaga, pero sin ritmo de competencia desde el 13 de mayo pasado.
Pékerman sorprendió, también, al reafirmar su fe en Dávinson Sánchez después de su mal partido del debut. Lo cambió de perfil, eso sí. Y con perfil al revés, estuvo derecho. Así es la vida.
Wílmar Barrios, otro coloso en Kazán en el quite y el pase seguro, jugó con Abel Aguilar, el otro 5 del doble 5, al que su maltrecho aductor lo sacó del partido antes de acabar el primer tiempo. Salió en camilla cuando sintió el tirón sin contacto de ningún rival, a la media hora de juego. Mateus Uribe, entonces, llegó con la trompeta de la caballería. Y corrió como purasangre.
Con esas reformas en la estructura, Colombia se dobló los puños de la camisa y planteó un pulso en la mitad de la cancha, bien lejos de su arco, y le dobló el brazo a una Polonia superada en intensidad, juego colectivo, fuego individual, orden e inspiración.
En ese reparto de solistas, Cuadrado fue el clarín de batalla en la derecha, con aguadas gambetas en la oreja de la defensa polaca. Al minuto 32, un enorme pase de 30 metros de Barrios lo hizo correr, gambetear y centrar. Córner. Corre el reloj.
Cuadrado trinó otra doble gambeta, irrumpió en el área y tiró. Otro córner. De esa esquina salió el primero de Colombia: James cobró, Cuadrado la rodó, Quintero la filtró, otra vez James la levantó con su zurda de seda y Mina la cabeceó. La pelota tan bien llevada ya era 0-1 en el minuto 40.
Con la ventaja en la bolsa, el segundo tiempo fue la horma del zapato de esta Selección Colombia de Pékerman, que volvió a ser la de hace cuatro años en Brasil, la que no pudo verse igual durante cuatro años de eliminatoria y dos Copas América: pues con el mismo balompié de balón al pie, el mismo orden y la misma intensidad retrocedió 15 metros en el campo y puso la carnada para el hambre polaca.
Y Colombia, con su juego veloz y preciso, con dos pases cortos y uno largo, liquidó en velocidad a un rival desesperado que dejaba enormes campos vacíos entre el último defensa y el arquero. Cinco minutos del segundo tiempo y Quintero tronó los dedos, apareció el balón en contragolpe, Cuadrado jugó con Falcao, que remató apresurado. Dos minutos después, Quintero giró sobre sí mismo y, en remolino, giró de espaldas y dio un sensacional pase de 35 metros otra vez para Cuadrado. Esa vez, el remate de James lo paró el portero.
El fútbol de vértigo de Brasil ya estaba de vuelta en Rusia. Tres minutos más tarde, el que inventó el tercer contragolpe fue James: Quintero tiró de lejos. Hasta que llegó el 0-2, el gol a la leyenda de Falcao: su primera anotación en un Mundial de fútbol fue asistida por Quintero por abajo. Balón al pie. No a la cabeza. Repito, balón al pie y puntazo rastrero para el 0-2. Minuto 25 y ya Kazán era carnaval de 32.000 colombianos que vitoreaban a Falcao, el máximo goleador histórico de la Selección (30), gritaban “¡olés!” y cantaban que eran locales otra vez. Y lo eran.
El fuerte Lerma relevó a Quintero. Era hora de ponerle candado a la victoria, a la que le faltaba un gol más: contragolpe eléctrico, a la velocidad del rayo de Cuadrado a un descomunal pase de James. Galopada y gol: 3-0 como premio a uno de los mejores. Y pudo ser uno más si Mateus la mete de taquito en el minuto 83… Para entonces, Bacca ya había reemplazado a Falcao, quien se marchó entre aplausos.
Quintero fue la magia del baile. James, la sensación y figura del partido. Barrios, el motor de quitar y pasar. Cuadrado, la electricidad. Falcao, la leyenda … ¡Y Ospina, el hombre de acero! Tres cierres suicidas ante Lewandowski, al que le paró con el pecho un cañonazo, terminó cojo y volando.
Y Pékerman, claro está, refundó la Selección en su estilo, en el mejor de su juego que no se veía desde el pasado Mundial de balompié. El fútbol se llama como se debe jugar otra vez el jueves, contra la potente Senegal, a la que toca ganarle en otro partido definitivo para clasificar.
Otra vez será un duelo de “ellos o nosotros”, como calificó el capitán Falcao este contra Polonia, y en el que habrá que ganar, de nuevo, como sea. Ojalá, como ayer domingo en Kazán.

Síntesis

Polonia 0/3 Colombia
Polonia: Wojciech Szczesny; Lukasz Piszczek, Jan Bednarek, Michal Pazdan, Bartosz Bereszynski; Grzegorz Krychowiak, Jacek Goralski, Maciej Rybus, Piotr Zielinski, Dawid Kownacki; Robert Lewandowski.
DT: Adam Nawalka
Colombia: David Ospina; Santiago Arias, Yerry Mina, Dávinson Sánchez, Johan Mojica; Abel Aguilar, Wílmar Barrios, Juan G. Cuadrado, Juan F. Quintero, James Rodríguez, Radamel Falcao García
DT: José Pékerman
Cambios en Polonia: Kamil Grosicki por Kownacki (12 ST), Lukas Teodorczyk por Bereszynski (28 ST) y Kamil Glik por Pazdan (35 ST).
Cambios en Colombia: Mateus Uribe por Aguilar (32 PT), Jéfferson Lerma por Quintero (28 ST) y Carlos Bacca por Falcao (33 ST).
Goles de Colombia: Mina (40 PT), Falcao (25 ST) y Cuadrado (30 ST).
Expulsados: no hubo.
Figura: Juan Fernando Quintero.
Estadio: Kazan Arena.
Asistencia: 42.873 espectadores.
Árbitro: César Ramos (México).
GABRIEL MELUK
Enviado especial
Kazán
En twitter: @MelukLeCuenta
Camilo Nieto
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